CABRITA siempre fue un artista total y sobre todo clásico. Conocido por su obra escultórica en grandes o pequeñas dimensiones, y por sus trabajos sobre papel, nunca ha dejado de pintar desde los principios de los 80 cuando empezó a ser conocido. Después de un largo periodo en que sus pinturas eran sobre todo abstractas y, de alguna forma, conectadas con la geometría, en los años más recientes, el paisaje es el tema de su obra quizá por vivir casi en permanencia en su casa-taller en el campo, en el sur de Portugal.De referencias formales, siempre abstractas, éstos paisajes de CABRITA se localizan en la tradición pictórica europea una continuidad que nos viene desde finales del XIX hasta la contemporaneidad y, de hecho, CABRITA es fundamentalmente pintor.